domingo, 28 de noviembre de 2010

Cuba importa equipos de seguridad antimotín

por Richard Roselló

Periodista Independiente

 

24 de noviembre de 2010

 

Cuba recibe equipos de seguridad antimotín para prevenir presuntos disturbios por la grave situación en que vive la Isla, según indicaron fuentes dignas de confiar.

 

“Un grupo de contenedores procedentes de Alemania, fueron descargados esta semana en el puerto de La Habana con armas y equipos de seguridad antimotín”, indicó un empleado del puerto que pidió no ser nombrado.

 

 “Los contenedores incluían varios tipos de armas, escudos y otros implementos para grupos antimotines” señala otro informante.

 

Un arsenal antimotín fue visto por primera vez por tropas especiales a inicios de agosto de 1994 cuando ocurrieron los hechos de “El Maleconazo” en Ciudad de La Habana en que miles de cubanos se lanzaron a las calles del Malecón de la capital, pidiendo libertad.

 

Varios vehículos de asaltos, hombres con gases tóxicos, arma con balas de goma, petos y otros fueron mostrados al público para controlar los disturbios en la que no hubo que ser empleados.

 

Dado la grave situación económica por la que atraviesa la Isla; el alto costo de la vida; la suspensión próxima de más de un millón de trabajadores “disponibles” de sus puestos laborales y el incremento del desempleo así como el aumento de delitos callejeros, asaltos y robo con fuerza ocurridos en las últimas semanas contra entidades estatales y ciudadanos de la calle, las autoridades cubanas ponen en alerta a la policía y tropas militares.

 

En el mismo orden “se ha advertido a los ministerios, combatir cualquier acto contrarrevolucionario contra objetivos sociales que ocurran en las calles”, dijo un trabajador del Ministerio de Educación que ha sido llamado como voluntario a realizar guardias en la vía pública.

 

Otros hechos han llamado la atención del gobierno sobre supuestos actos de deterioro de responsabilidades aparecidos recientemente. Se trata de incendios ocurridos en objetivos del gobierno: almacén, escuela y ómnibus urbano de la ciudad.

 

Además, el desaliento de trabajadores por cuenta propia a obtener licencia ante los altos impuestos de hasta el 50 % sobre su renta anual podría fracasar la oportunidad a que trabajadores “disponibles” no encuentren un empleo en estas áreas como se tenía previsto.

 

Un clima de inquietud se vive dentro de la población por los desordenes ocurridos mientras se espera consecuencias sociales, alentados por los rumores de posibles focos de disturbios y desobediencia civil contra las autoridades del país.


Suecos en Cuba: tres celebridades en América

por Richard Roselló

Periodista Independiente

 

16 de noviembre de 2010

 

Los cubanos han sentido siempre una gran atracción por el teatro musical en todas las variedades. Han sido numerosas las manifestaciones en la escuela cubana; el drama, la zarzuela española y la opereta; el teatro y la tonadilla. Pero el ballet y la opera, fueron el bálsamo de las ansiedades.

 

Foto: Teatro Tacón de La Habana

 

Tres gloriosas constelaciones de estrella se hicieron sentir en América durante el siglo XIX de la Cuba española. Dos de ellas pasaron por el Teatro Tacón de La Habana: la bailarina Fanny Elssler y la soprano, Jenny Lind (1820-1887), conocida como el ruiseñor sueco. Una tercera muy especial fue María Taglioni, bailarina sueca, que aunque nunca estuvo en Cuba su nombre fue muy famoso.

 

Fue una época en que La Habana antes de mediar dicha centuria se había ganado el apelativo de Capital Filarmónica de Nuevo Mundo. Y razones sobraban.

 

Quienes tuvieron el privilegio de ver y escuchar en aquellos tiempos inolvidables del Teatro Tacón a los italianos: Clorinda Pantanelli, Teresa Rossi, a Lorenso Salvi, Albina Steffanoni, Angelina Bosio, Adelaida Ristori, Fortunata Tedesco, los franceses Ravel, Fanny Elssler, Jenny Lind, Matilde Diez (Española), Enrique Herz (Alemán), El Coro de las Niñas de Viena, Hasen (E.U), Catalina Hayes (Irlandesa) y los alemanes Herr Krausz y el compositor Giacomo Meyerbeer y muchas estrellas, podrán afirmar la gran vida artística que tuvo aquel meritorio escenario.

 

De cuantos artistas, grandes y pequeños, pisaban Cuba, una gran cantidad cuando menos actuaba en el escenario del Tacón ante las 3000 localidades.

 

El vapor Teviot a cuyo bordo vienen los grandes artistas líricos que han de conformar las delicias de La Habana en el gran Teatro, llega con una de sus estrellas. La Habana vacía sus bolsillos para ver en bailar a la Elssler.

 

Foto: Fanny Elssler

 

El 23 de enero de 1841 la actriz sueca Fanny Elssler (1810-1884), se presentaba junto a la compañía francesa de los Raveles en el Tacón de La Habana.

 

Un gentío inmenso llenaba el gran circo del Tacón. Fanny había convocado a su espectáculo todo lo que de culto y hermosos encerraban las murallas de La Habana y su población de extramuros. La primera noche los plausos y su actuación hicieron historia en toda la ciudad. Los periódicos no dejaban un solo instante de referirse a su actuaron especial.

 

La encantadora Fanny (bailarina, la reina de la danza) aplaudida con entusiasmo en Petersburgo, en París, en Londres, en tantas capitales de la Europa, no podía menos de obtener igual acogida de este público de La Habana.

 

En 1840 embarcó de Europa hacia Estados Unidos para una gira de tres meses que duró dos años. Allí fue enormemente aclamada y llegó a actuar ante el presidente de Estados Unidos.

 

Quizás Elssler fuese más conocida por sus representaciones de danzas húngaras, polacas y españolas, especialmente de la cachucha, danza española ejecutada con gran acierto, y que identificó el temperamento exuberante de la bailarina a lo largo de su carrera.

 

El ballet romántico, sin embargo, no se inspiró exclusivamente en temas sobre seres de otro mundo. La Fanny Elssler popularizó un personaje más terrenal y sensual. Su baile más famoso, la cachucha en Le diable boiteux (El diablo cojo, 1836), era un solo de estilo español ejecutado con castañuelas como algo que estaba de moda en la época.

 

Foto: Fanny Elssler, la Cachucha

 

Las mujeres dominaban el ballet romántico. Aunque había buenos bailarines, que fueron eclipsados por bailarinas como Taglioni, y las italianas Carlotta Grisi y Fanny Cerrito, y otras que pasaron por la isla.
 

En 1850 otra estrella nacida en Estocolmo y cuyo verdadero nombre era Johanna María Lind organizaba una gira de conciertos por América, en especial: Estados Unidos y La Habana, que le proporcionó generosas ganancias.

 

Foto: Jenny Lind

 

La llegada de Lind a La Habana fue a mediado de marzo de 1852. La ciudad y su público hambriento de música no habla más que de la soprano tan esperada, rodando el nombre Jenny, Jenny, entre los perfumes, la cascarilla y los ganchos de tocador de las damas; entre las muselinas, las gasas y los encajes de los establecimientos de moda, entre las cajas de azúcar, los barriles y sacos de harina, las botijas de aceite y los tercios de tabaco del muelle, y hasta, entre las butifarras, la manteca, el salchichón, los jamones, las pastas, los higos y la canela y el clavo de las bodegas y almacenes de víveres por mayor y menor aunque sean primas donnas absolutas y di cartello.

 

La música reina en La Habana en todos los círculos sociales de la sociedad, la Jenny y solo la Jenny. La revolución de los establecimientos de moda había comenzado; los mercaderes, los modistas, los joyeros, los sastres, los perfumistas. Y solo porque se hallaba en la Habana la artista sueca Jenny Lind.

 

El gusto artístico comienza a desarrollarse y la música y la poesía despiertan profundos ecos en los habitantes de la capital de país. El espectáculo lírico estaba a gran altura. Estos artistas tan notables, aquellos coros tan completos, esa magnífica orquesta, esos hermosos lienzos pintados en Italia con tanta perfección, hicieron honor a La Habana.

 

Desde que Fanny Elssler (1841) obtuvo un triunfo lisonjero, no puede menos Jenny Lind recibir una ovación.

 

Foto: María Taglioni

 

Y no era la única. María Taglioni, nunca estuvo en América. Pero en La Habana, si estaban sus perfumes en pomadas y jabones Taglioni en su honor. Tan perseguida por las habaneras era el agua de Taglioni, sello de esa bailarina usado por la primera vez, el extracto para el pañuelo en 1848.

 

La bailarina ítalo-sueca María Taglioni, a quien la crítica consideró la mayor rival de Elssler dentro del ballet. Durante toda su carrera las dos bailarinas provocaron acaloradas discusiones entre los críticos; Taglioni fue conocida como fría, etérea, como una sílfide, y Elssler como una mujer voluptuosa y terrenal.


domingo, 21 de noviembre de 2010

Piloto de avión que se estrelló en Cuba lanzó su último epitafio

por Richard Roselló

Periodista Independiente

 

18 de noviembre de 2010

 

Al menos tres señales de emergencia entre ella un último aviso fueron los últimos reportes recibidos por la torre de control de La Habana, poco antes de precipitarse a tierra una nave de la aerolínea cubana Aero Caribbean con 68 pasajeros a bordo, según versiones de un trabajador de la aeronáutica civil del Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana y que pidió no ser nombrado.

 

La fuente señaló que “los dos pilotos del avión (ATR-72) emitieron al menos tres señales de emergencia” poco antes de desaparecer de los radares.

 

“Nos jodimos” fue lo único que se escuchó de uno de los pilotos, indicó la fuente. También expresó que “una de las operadoras de la torre entró en shock al recibir la inesperada noticia que la paralizó”.

 

Agrega el informante que “que una de las alas de avión se partió probablemente por congelación al no funcionarle los mecanismos de seguridad. Dijo que eso provocó hipotermia en los tripulantes antes de ser devorados por un explosivo incendio que los carbonizó antes de llegar a tierra”. Las notas publicadas por la agencia Reuters confirman que los cadáveres estaban calcinados.

 

Destacó además, que “la nave perdió el control y cayó en medio de un pedregal con arbustos a más de veinte kilómetros de Sancti Spíritus, en el centro sur del país”.

 

El accidente ocurrido el pasado jueves 4 en la noche coincidió la llegada del primer frente frió a la Isla.

 

Las autoridades cubanas realizaron una intensa búsqueda para recolectar en pocos días todos los cadáveres que se encontraban dispersos en un área de menos de tres kilómetros de radio. Entre los fallecidos se estaban 40 cubanos y 28 turistas de 10 países.

 

Noticias de prensa dijeron que es el peor accidente aeronáutico ocurrido desde hace once años atrás en La Habana donde perdieron la vida 126 pasajeros.


Bibliotecas... ¿para qué? II

por Richard Roselló

Periodista Independiente

 

18 de noviembre de 2010

 

A principios de este año publicamos en Internet con el titulo encabezado, un reportaje sobre el deficiente servicio de una “biblioteca popular” al sur de La Habana.

 

En aquel entonces señalaba el vacío bibliográfico de la única biblioteca estatal existente abierta al público en ese municipio. Indicaba además, la falta de actualización de nuevas obras de lectura en detrimento de los intereses del lector y el desaprovechamiento del un espacio creado para esos fines. Una biblioteca que muestra, a la vista, estantes vacíos, con libros repetidos y un inmovilismo que los caracteriza desde que se inauguró en la década del 90.

 

Hasta ahora nada ha cambiado. De nada sirvieron nuestras denuncias y quejas de los lectores. Mucha contradicción, eso sí, lo publicado por la televisión sobre la política del habito de lectura y de que los cubanos somos un pueblo culto. Más cuando el objetivo de una biblioteca es atraer y no alejar a los usuarios.

 

Practicas de otra índole y con serios problemas en los servicios, aparecen en otras Bibliotecas de La Habana y vienen sucediendo por más de una década, según hemos comprobado. Algunas de estos locales de mayor categoría y otros muy famosos por sus centurias de creada. Nos referimos a la Biblioteca del Instituto de Literatura y Lingüística, antigua sede de la Sociedad Económica de Cuba ubicada en la avenida de Carlos III.

 

Ese emblema de la cultura cubana hecho realidad desde el siglo XVIII parece predestinada ha desaparecer por la falta de buenos servicios que atentan contra investigadores, historiadores y escasos lectores que acuden a ella como resultado de una ineficiente política y la falta de hacer que los paraliza.

 

Un Instituto de intelectuales que no se percatan que los servicios son la cara de la institución y no el trasero. Recordemos que primero nació la biblioteca…

 

Por increíble que parezca los que allí asisten, en contados casos, según me cuenta un historiador, tienen que supeditarse a la excesiva demora de entrega de libros y documentos por falta de empleados. Es paradójico porque en Cuba sobran más de un millón de cubanos de los puestos de trabajos. Y la institución no es capaz, si quiera, de buscar un disponible o poner un anuncio en una emisora radial, gratuitamente, para resolver un problema que los arrastra por muchos años.

 

De hecho sus trabajadores les imponen a los estudiosos nacionales y extranjeros, restricción de su investigación, violando sus expectativas de horarios establecido de la biblioteca (8:00am a 5: 00pm). Después de las 2: 00pm se prohíbe solicitar libros por una sencilla e irrespetuosa conducta. La única empleada encargada del servicio de libros necesita estudiar porque dicen que se está superando. Y lo dicen a coro, como si ello solucionara esa epidemia de irrespeto contra los usuarios.

 

No es todo. Se ha visto en años, como el servicio de esa biblioteca, la más importante del país que atesora los mejores fondos del patrimonio escrito de la Isla, se ven amenazados a desaparecer. Y aquí no preocupa al Estado cubano financiar la restauración de libros, periódicos y revistas muy antiguas que están desapareciendo como polvo en manos de lectores. A lugar, las pésimas condiciones de sus archivos donde el calor, el polvo, la incorrecta iluminación con el contraste de la sala de lectura favorecen a su deterioro paulatino. Tampoco existe un servicio de fotocopias para quienes tienen acceso a sus fondos. Menos aun, te prohíben llevar cámara digital o analógica para obtener reproducciones, ni aun pagando el servicio.

 

Más preocupante es que el Instituto no dispone de recursos para microfilmar los antiguos documentos y evitar un mayor deterioro de los documentos primarios en manos de los investigadores.

 

Sobre la contaminación, la biblioteca y pasillos de esa llamada “prestigiosa institución” presenta un estado de suciedad y polvo; jardines sin limpiar, muy desordenados. Aledaña a la biblioteca, existe una escuela cuyo requisito pedagógico de enseñanza son los continuos gritos que atentan contra aquellos que investigan y laboran allí.

 

Como cualquier otra biblioteca: ésta carece de actualización de libros publicados en el país y falta iluminación en mesas de trabajo del lector…

 

Como si no les bastara, la biblioteca se ve afectada al cierre en muchas ocasiones. Porque dicen que están fumigando, reparando o en trabajo voluntario. O no hay luz. Lo peor es que a cada rato dejan de dar un servicio porque se les ocurre dar un congreso, reunión o un largo etcétera.

 

Hace pocos días, esta “insigne biblioteca” cerró sus puertas al servicio de usuarios durante una semana porque estaban dando un homenaje a Lezama Lima. El vilipendiado intelectual cubano tantas veces menospreciado por los que dirigieron esa institución.

 

Y uno se pregunta ¿Que tiene que ver la sala de teatro de ese Instituto con la biblioteca? ¿Con tantos problemas que ustedes tienen todavía se dan el lujo de cerrar un servicio de uso semanal?

 

¿Hasta cuándo?, es la interrogante de los usuarios afectados.


lunes, 15 de noviembre de 2010

Trasladan a preso político por denunciar tratos crueles e inhumanos

por Richard R0selló

Periodista Independiente

 

9 de noviembre de 2010

 

Foto: José Luís Rodríguez Chávez

 

 
El preso político y bibliotecario independiente, José Luís Rodríguez Chávez, confinado por más de un año en la Prisión de Melena II, fue trasladado a la de Quivicán, en la provincia Habana por denunciar violaciones contra las reglas mininas para el tratamiento de los reclusos, adoptadas por Naciones Unidas.

 

Rodríguez Chávez fue enviado a la Prisión de Quivicán a fines del pasado mes por su postura de defender el derecho de los reclusos a un mejor trato.

 

En misiva enviada a este comunicador, Chávez denuncia el hacinamiento que existe en Melena por sobre la capacidad de los 1,200 reclusos existen 1,356. Agrega además, que un grupo de presos son enviados a fabricar bloques, en una industria aledaña a la penitenciaria con el beneficio de pagar su trabajo. “Algo que es falso”, señala. Y agrega que “en cinco meses no les han pagado un centavo”, y algunos reclusos han tildando al jefe de la prisión de: “mentiroso”.

 

Refiere que son enviados a laborar en “un maquinaria de esclavos a confeccionar diariamente hasta 2,000 unidades de bloques, considerado como inhumano, por las malas condiciones del penal y la horrible alimentación que éstos tienen”.

 

Indica que aquellos que han denunciado el abuso les han sido suspendidos la medida de extra penal que los enviaría a la calle, bajo juramento.

 

En un balance de los problemas más incisivos que pasa la Prisión de Melena destaca el disidente que existen filtraciones en techo de todos los destacamentos. Que más de cien presos duermen en el piso.

 

Hay falta de alumbrado; la atención médica es deplorable y los alimentos descompuestos y mal confeccionados originan serios problemas de salud en la población penal con altos índices de enfermedades digestivas.


miércoles, 3 de noviembre de 2010

¿Es tan difícil…?

por Richard R0selló

Periodista Independiente

 

28 de octubre de 2010

 

 

El titular es una de las preguntas de la Fundación para el Cambio Participativo creada recientemente al oeste de Ciudad de La Habana. El pasado martes 19, dos veteranos líderes de la disidencia y con amplio prestigio por sus resultados nacionales, Francisco Chaviano y Félix Bonne Carcassés, dejaron instituido ante varios miembros una propuesta de cambio, llena de propiedades curativas.

 

¿Es tan difícil conseguir una guataca y limpiar la hierba mala de las calles?

¿Vivimos realmente en una comunidad viva?

¿Se resuelven nuestros problemas?

¿Cuanta contaminación existe a su alrededor: ruidos, desechos sólidos, ríos y playas?

¿Se han resuelto sus preocupaciones, necesidades, anhelos, aspiraciones o frustraciones en medio siglo? ¿No ha sido usted indemnizado por daños causados por catástrofes?

¿Existe verdadera flexibilización en el trabajo privado; se sentirá dueño de lo que tiene; dispondrá de los  recursos y protección legal?

¿Merecemos los cubanos que nos dirijan personas que nunca están en sus puestos; burócratas; teóricos que no promueven la creatividad y las ganas de trabajar, y tienden a alentar la indiferencia y el inmovilismo en el hacer?

 

Esta y otras preguntas se enlazan en un ambicioso cuestionario que pretende, sino cómo resolver desde la perspectiva de ciudadano cubano, los problemas que confronta la comunidad en que vivimos.

 

La Fundación no busca protagonismo, indica uno de sus textos. Tampoco pretende dejar pasar el tiempo. Ultima detalles e intenta mediante una encuesta, escudriñar en los conflictos y alternativas que emergen del tejido social del pueblo cubano.

 

A la par, esa joven organización reconoce que muchos de nuestros problemas nada tienen que ver con el embargo y menos con la Unión Europea. De ahí el imperativo de evaluar los problemas que han quedado dormidos en la gavetas oficialistas por falta de visión. Por tanto la FCPARTI por sus siglas, pretende mediante la encuesta, contribuir con la ciudadanía a encontrar soluciones a las muchas dificultades atribuidas a problemas subjetivos creados por ellos mismo y a causas relacionadas con métodos urgidos de cambio.

 

¿Es tan difícil…?

 

El cuestionario es un trabajo novedoso que implica a todos por igual. Se abordan desde los estados de cada localidad, calidad de vida, catástrofes, diversiones y problemas jurídicos para finalizar en el trabajo que realizan los funcionarios.

 

“En verdad de las verdades, los cubanos hemos vivido décadas de promesas incumplidas. Basta ya con que la mejor manera de ignorar nuestros problemas, siga siendo el modo de no resolverlos. Por encima de las posiciones ideológicas, es hora de la voluntad. De acercarse a los comunitarios y digan, cuáles son sus problemas y como resolverlos juntos, si así desean”, expresa Chaviano principal analista del proyecto.

 

Más adelante señala el ex preso político que: “la burocracia, el paternalismo, la falta de visión, la indolencia o la comodidad han sido arrastradas de un barrio al otro del país por el cepo ideológico del inmovilismo castrista. Esas amalgamas diseñadas por el sistema han creado certidumbre e incertidumbre en la población cubana”.

 Y termina diciendo que “cinco generaciones de cubanos se han acostumbrado a convivir bajo el síndrome del ‘no’, las prohibiciones y el hostigamiento. El miedo sembrado hacia la población, mantiene paralizado a personas que temen arriesgar vidas por criticar los problemas directamente al gobierno. Esas dilaciones cansan y erosionar la confianza de los cubanos”.

 

Estiman los líderes disidentes que no se puede confinar a un pueblo al laberinto de los desesperos y las desesperanzas todo el tiempo. Mientras están consientes que las soluciones que proyectan  la Fundación y sus miembros, son quimeras.

 

Al tanto, el camino de la nueva Fundación para el Cambio Participativo, en cambio, tiene rosas y espinas y habrá que conjugarlos. La pregunta es simple…

 

¿Es tan difícil…?