Periodista Independiente
1 de marzo de 2011
Foto: Francisco Chaviano con miembros del Parlamento de la Sociedad Civil Independiente
Necesitamos caras frescas, voces nuevas, lideres que miren adelante y no a los bolsillos, representantes con mentalidades de conocimiento. Personas que consagren en el deber de buscar los cambios que necesitamos y no gendarmes, ni gladiadores que han llevado a nuestros destinos a un abismo, bien por ignorancia histórica, obstinación, otra por mala fe.
Para que en ciertos sectores de la disidencia, no continúe siendo un feudo de un grupo de patrioteros, aquí les va una prepuesta fresca. Y para esos que piensan que no hay cambios, como fase sacramental, le decimos, ¡abran los ojos! Lo nuevo es muy reciente y lo antiguo forma escombros.
Francisco Chaviano, el ex preso político, acaba de presentar una propuesta renovadora de cambios.
Su viejo proyecto de Agenda para la Transición Cubana, está proponiendo crear el Parlamento de la Sociedad Civil Independiente como una etapa superior o continuidad de los esfuerzos de unidad iniciados por Concilio Cubano, La Asamblea para Promover la Sociedad Civil y la propia Agenda.
Según el documento puesto en paginas digitales, destaca que el Parlamento de la Sociedad Civil Independiente “es una entidad que se propone reunir a las fuerzas pro democracia para luchar de forma pacífica por un CAMBIO en Cuba que ponga fin al totalitarismo. Y que deberá estar integrada por representantes de entidades independientes en calidad de personalidades, de grupos y zonas”.
Para su efecto, proponen que “el Parlamento sea encabezado por una presidencia colegiada de galardonados con el Premio Sajarov y aspirantes al Premio Nobel de la Paz, a modo de lograr la tan ansiada unidad opositora, catalizando la reunión de la generalidad de la Sociedad Civil Independiente y con ello dar validez internacional a la oposición democrática cubana”.
La nueva propuesta mantendrá las líneas de sus principios: la “liberación incondicional de todos los presos políticos, cese de la represión contra opositores pacíficos y la sociedad. También batallará por el respeto de los derechos humanos en general y por mejorar la situación de penuria que sufre la ciudadanía”.
El Parlamento contará con una estructura de un órgano supremo del Parlamento de la Sociedad Civil Independiente que es la Junta Nacional, la cual estará compuesta por: CÁMARA ALTA, un tesorero, un Secretario y un consejo asesor. Mientras la CÁMARA BAJA estará representada por tres bancadas donde se inscribirán los grupos según su arbitrio y determinación por afinidad de acción, cada una con su líder. Serán esta: Bancada Política, Bancada de Trabajo Cívico y Bancada de Observación e Influencia. Su estructura serán las Juntas de Representantes de nivel nacional, provincial y municipal.
En caso de solicitar su ingreso a la agrupación podrá aspirar al nivel que considere le corresponde por su importancia, su reconocida actividad, el número de sus miembros o su trayectoria en la lucha por la democracia. En consecuencia de ese interés, presentará la solicitud correspondiente al Secretariado de Trabajo nacional, provincial o municipal, según el nivel a que aspire estar representado el solicitante.
En cuanto a su funcionamiento, el Parlamento dispondrá de acuerdos y renovaciones de mandatos.
Finalmente, el reglamento presentado como primario podrá estar sujeto a cambios por la Junta Nacional, siempre que el número de votos favorable a la propuesta de cambio equivalga a no menos de las dos terceras partes de los representantes que estén presentes en la reunión de dicho órgano y a más de la mitad del total de sus integrantes.
El proyecto de los que desean cambios urgentes y ahora: ¡Que sea pronto! Al tanto le deseamos un ¡Hurrah por el Parlamento!
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